Dolor de Rodilla

En los últimos años se ha avanzado mucho en cuanto al dolor , pero más allá de eso el aspecto sensorial y todos los aspectos emocionales, conductuales están también asociados al dolor, algo importante y que en ocasiones no se ha tomado en cuenta son las adaptaciones motoras presentes en todos los síndromes de dolor musculoesqueletico, lo cual nos va a llevar a varias estrategias de valoración y en el caso del dolor de rodilla es una queja frecuente que afecta a personas de todas la edades, puede ser resultado de una lesión, como una rotura de ligamento o un desgarro de cartílago, algunas enfermedades, como la artritis, la gota y las infecciones , también pueden provocar dolor de rodilla.

De tal manera que al hablar de dolor y de cambios sensitivo-motores hacemos referencia al síndrome femoropatelar también se conoce como condromalacia rotuliana externa, que se caracteriza por un dolor retro o peripatelar exacerbado por actividades que sobrecargan  o estresan la articulación al realizar sentadillas, correr, subir y bajar escaleras entre otras cosas. Es visto como un diagnóstico de exclusión ya que se llega a realizar el diagnostico cuando no existe ninguna patología que pueda explicar el dolor del paciente.

En cuanto a la prevalencia, el 25% de los deportistas  sufren de este síndrome y deben interrumpir la actividad y entre un 70% y 90% presenta síntomas recurrentes y por ende el fisioterapeuta o el equipo multidisciplinario se ve en la necesidad de optimizar los tratamientos a largo plazo, y es más prevalente en mujeres que en hombres y en deportistas en los corredores. De modo que, la evidencia científica nos habla que en los centros de medicina del deporte la consulta más frecuente es los problemas de rodilla y como ya mencionamos en corredores con un 42% en consulta y un 39% con el diagnostico de Síndrome Femoropatelar.

Causas del Síndrome Femoropatelar.

  • Rotación interna del fémur o la rotación externa de la tibia.
  • Rodilla en valgo.
  • La forma de la rótula.
  • Pronación del pie, que favorece al valgo de rodilla.
  • Displasia de los cóndilos femorales; los cóndilos no tienen el tamaño adecuado, son más pequeños y no van a proporcionar un espacio suficiente para el asentamiento de la rótula.

En relación a este último punto, se habla de un edema óseo causado por la compresión repetida en hueso, que conlleva a una alteración del metabolismo y del retorno venoso, activando así los nociceptores y a su vez el dolor. Pero en esta alteración se debe tomar en cuenta el grupo muscular, ya que se presenta una atrofia del musculo vasto medial o de todo el cuádriceps, la pregunta es será la causa o la consecuencia?

Lo anterior nos lleva a no solo realizar una valoración estática, si no también ver de qué manera se activan dicho músculos, por consiguiente cuando nos encontramos en presencia de pacientes que son asintomáticos que comienzan a realizar un programa de ejercicios de 6 semanas y posterior a ellos refieren dolor de rodilla, al realizar el estudio de electromiografía encontramos un retraso en la activación del vasto medial, lo cual lleva a la causa del dolor y de padecer un síndrome femoropatelar.

Pero no hay que olvidar el trabajo de los músculos antagonistas (isquiotibiales) los cuales juegan un papel importante, ya que la tensión de los mismos producen un deslizamiento y una inclinación de la rótula, lo cual aumenta la presión  sobre la carilla lateral de la misma pudiendo ser causa de dolor y de degeneración articular.

Estrategias de valoración y tratamiento

  • Para realizar una correcta valoración y tener éxito en el tratamiento, se debe comenzar por evaluar los patrones motores, es decir, estudiar el reclutamiento muscular y ver de manera biomecánica como podemos hacer correcciones aislando componentes musculares, observando que musculo se activa más tarde y se relaja más rápido.
  • Posteriormente adaptar los ejercicios, tanto al paciente como al deportista.
  • Importante tomar en cuenta la articulación coxofemoral, la activación del grupo muscular, glúteo mayor, tensor de la fascia lata, y su repercusión biomecánica en rodilla.